Las trianeras se desplazaron hasta el pueblo cordobés de La Rambla, donde se encontraron un árbitro muy casero, que provocó que en el minuto 5 del partido el equipo local llevara anotado dos goles a su favor. El primero de ellos llegó tras un balón en largo a su delantera, y Maria Jesús, con la posición ganada, recibe una zancadilla por detrás, tirándola al suelo, y quedándose la delantera sóla ante Nazaret, que nada pudo hacer para mantener a cero la portería visitante.
Sin poder reponernos del primer gol, nuevamente el árbitro hace la vista gorda, ante 4 jugadoras locales situadas en clarisima posición de fuera de juego, anotándonos el segundo gol.
Tras esto, las nuestras, se repusieron y se asentaron en el campo, demostrando su nivel y plantándole cara al equipo de Las Ramblas, pero no se puedo cambiar el resutlado antes del descanso.
En la segunda parte las trianeras, que cambiaron su sistema de juego, se volcaron sobre la portería rival, y consiguieron anotar en el minuto 10 un gol, obra de Almudena tras recibir un pase de Maria Jesús, poniendo el 2-1 en el marcador.
El equipo seguía intentandolo, presienando a las locales, y como consecuencia de tener adelantadas las líneas llegaria el tercero para las cordobesas.
Minutos más tarde, anotaríamos el segundo gol, obra de Camacho. Pero las cordobesas volverían a aprovechar una nueva contra, para anotar el 4-2 final.
Tuviemos alguna aportunidad más, como una falta sacada por Debo, en la primera parte, que dio en el largero, y en la segunda parte, un nuevo balón al larguero de Choya, y una falta sacaba por Bea, que rechaza la portera y que Camacho no acierta a introducir en la portería.
Un resultado demasiado amplio para lo que se vio en el terreno de juego, donde el Triana mereció más, haciéndo un buen partido, pero la suerte no estuvo de su lado, y los árbitros se puede decir que fueron demasiado caseros.
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